Es importante explicar el porque somos el pueblo elegido. Esto no viene de ser una raza distinta (se puede uno convertir al Judaísmo sin problemas sea uno africano, esquimal, chino o europeo) ni de ser mejores que nadie.
HaShem nos eligió para cumplir con sus obligaciones impuestas a quien fuera el elegido! Para cumplir con ellas y renunciar a muchas cosas que están permitidas a los demás. Pero, aún allí, no somos ni mejores ni superiores a nadie, ya que cualquier no Judío que cumpla con las 7 leyes de Noé, es también considerado un hombre justo.
HaShem nos eligió para cumplir nuestro rol en su plan (la Toráh) y nos dio esta tierra de Israel para vivir en ella. En eso somos distintos, no mejores, no iguales, distintos, tan distintos como un violín y un clarinete, ambos son instrumentos musicales y ambos integran la orquesta, pero tocan distintas partituras y no siempre al mismo tiempo.
Somos distintos y sin vergüenza de serlo, muy al contrario, con orgullo de serlo!
No comments:
Post a Comment